La tecnología de videovigilancia llamada Circuito Cerrado de Televisión (CCTV) sirve para observar en tiempo real una zona determinada. Son utilizadas desde hace mucho como un sistema de seguridad confiable, accesible y que se adapta a un gran número de situaciones.
El CCTV es comúnmente recomendado para hogares y establecimientos comerciales que quieran disponer de un medio para monitorear en vivo lo que sucede dentro o fuera de ellos.
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¿Qué es el CCTV?
Se emplean cámaras de vigilancia conectadas a monitores de video, televisores u otros dispositivos para que reproduzcan la imagen a tiempo real. También se le pueden añadir discos duros para que el video del día quede guardado para ser revisado en cualquier momento, convirtiéndose así en un elemento indispensable cuando hacemos frente a situaciones de robo o hurto.
Se puede ver la imagen en una zona de control especialmente dispuesto para ello y si se instala un sistema más complejo se puede manipular las cámaras,con posibilidad de realizar zoom, cambiar el enfoque, configurar el ángulo, etc. Algunas inclusive incorporan visión nocturna y alterarán inmediatamente a las autoridades cuando una irregularidad se presente.
¿Cómo se realiza la instalación de un CCTV?
Un sistema CCTV se puede instalar de manera sencilla, pero siempre de la mano de profesionales que garanticen el buen funcionamiento del mismo y que optimicen el rango de visión de las mismas. Para una instalación eficaz se debe realizar lo siguiente:
- Instalar las cámaras en los lugares deseados: Dependiendo del tipo de cámara CCTV, pueden tener una instalación más compleja; en muchas ocasiones se tiene que taladrar la pared para atornillarlas a ellas.
- Conectar las cámaras hasta el monitor: Esto se puede realizar mediante un cable coaxial, fibra óptica o trenzado de cobre. Dependiendo del lugar puede ser un trabajo que conlleve más o menos tiempo.
- Configurar el monitor o la zona de control: Después de que ya esté lo principal para el CCTV se tiene que configurar la zona de control.
- Disco duro o DVR: Por último se configura el grabador de vídeo digital que se va a utilizar.
Tipos de CCTV
Existen numerosos tipos de cámara en el mercado. La mayoría se puede clasificar de la siguiente forma:
- Cámaras convencionales: Son aquellas que se ven en la mayoría de establecimientos, son grandes y se pueden cambiar de lentes, también hay pequeñas y con iluminación infrarroja.
- Cámaras domo: Comunes de observar en hogares, se instalan en el techo y su visión va en una sola dirección. También existen las Domo PTX que giran 360° en horizontal y 180° en vertical.
Hay otros tipos de CCTV pero menos utilizados como las virtuales 360° y las discretas (o espías) que se ocultan fácilmente en algún sitio.
Como ya hemos descrito también existen cámaras que se pueden utilizar mediante internet como las wifi. En algunos casos se utiliza como respaldo un CCTV como precaución a cualquier eventualidad, como un problema con la conexión a internet y así se pueda seguir grabando el video a través de un disco duro o DVR.